POWDER IN NORWAY. Explorando las montañas noruegas con esquís
En busca de nuevos horizontes, en Semana Santa de 2016 nos propusimos ir a conocer las montañas del extremo norte de Noruega. Dicho y hecho. Era un sueño que siempre nos había atraído, pues pocas experiencias son tan exóticas para un esquiador como deslizarse por la nieve al borde mismo del mar.
En esa época en que todavía no ha terminado el invierno aún nieva casi todos los días en esta zona, situada dentro Círculo Polar Ártico. Así nos ocurrió a nosotros, de modo que tuvimos suerte con el tiempo. Unos días magníficos, en un entorno en que el manto blanco descendía hasta los mismos fiordos, con lo que nuestra aventura se desarrolló en su integridad con esquís de travesía.
A lo largo de casi diez días pudimos disfrutar de las auroras boreales, la sensación de la nieve polvo, el privilegio de abrir huella sobre ella cada día trazando itinerarios por montañas donde todavía no se había dibujado ni una sola traza, o la posibilidad de recorrer muchos kilómetros por encima de los fiordos helados es toda una experiencia difícil de repetir.